jueves, 20 de diciembre de 2012

La canción del final del mundo, una nada extraña pifia en el haarp, temor y Bach. EL ULTIMO POSTEO DEL MUNDO


(escribo esto porque en este momento 
un poco temo al final del mundo
 y no hay mejor forma que banalizarlo)

Lo dijiste hace bocha, sos flor de boludo, era posta lo del HAARP, ponele. O por ahí tendrías que haber abrazado alguna religión o fé...o tal vez simplemente un día (aquí omitimos la fantasía científica) la cosa se dio vuelta para los seres humanos. El último concierto branderburgués, el último winamp, las últimas páginas de "el sueño de los héroes" que apenas empezaba y pintaba que jugaba una bocha.
Primero esa lluvia irreal, la que escuchás bajo los techos de Constitución, que te mea un poco cada tanto, pero no se vé realmente. Dulcinea, tu Dulcinea, clavada en el infausto Mordor. Y después el silencioso no avance del roca. Terminaste esa porquería de final de Gorodischer. Eso es lo último que leíste completo, alto paco. Hubieras comprado la revista del ascenso.
Jasón, que Jasón y sus argonautas (mentiras de la Europa). Vos y el narigón infantil de enfrente. La tenue luz flourescente del roca. La lentitud insólita y torturante. Dale, unas páginas más, está buenísima, además aún no sabés que se termina el mundo. Escalada, che, hubiese estado bueno un poco más de lo interesante y menos del paco. Y a mí que, te contestan los peoristas.
Cuando bajás y ves la diferencia de tiempo, habida cuenta de tu teléfono muerto, te das cuenta de que por más de media hora no exististe. El limbo. Sí, esos dos alfajores medio calientes y las setenta y pico páginas de Bioy, más dos o tres intentos fallidos de encenderlo.
Al bajar del tren, además de dejar el limbo, pasás por una luz más en el andén, un pastor alemán todo mojado. Cae esa lluvia tan de mierda del verano, tibia, espesa, áspera, las babas de un más allá lujurioso.
El agua, las calles arroyos, llegás a tiempo para Filmoteca (todavía hay tiempo de llorar con los tanos), al menos escuchás la voz de ella y que cagada esto de que el mundo se termine cuando lo encontraste. Cosas de la vida y el apocalipsis.
Dejás una nota a los imprescindibles, el sueño, el winamp y todo el bajón te despiden con amor... Se cierran los ojos.


FINE
*pero cuando editen todo en el videoclub de mercurio, agradecés una señal de vida de cada uno cuando lo lea y pedís que pongan el "fine" con la foto de arriba y obligás a que cierren con Blades:


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